Los trastornos del sueño en adultos son condiciones que afectan la calidad y la cantidad de sueño experimentado durante la noche. Entre estos trastornos, se encuentran las disomnias y las parasomnias.

• Las disomnias son trastornos que afectan la capacidad de conciliar el sueño o mantenerse dormido durante un período adecuado. Ejemplos comunes de disomnias incluyen el insomnio, donde una persona tiene dificultades para quedarse dormida o permanecer dormida, y la hipersomnia, que se caracteriza por una somnolencia excesiva durante el día.

• Por otro lado, las parasomnias son trastornos del sueño que involucran comportamientos anormales o experiencias durante el sueño.

Estas pueden incluir pesadillas recurrentes, terrores nocturnos (episodios de miedo intenso durante el sueño profundo) y sonambulismo (caminar o realizar actividades mientras se está dormido).

Es importante destacar que los trastornos del sueño en adultos pueden tener un impacto significativo en la calidad de vida y en la salud general. Si experimentas síntomas persistentes como dificultad para conciliar el sueño, despertares frecuentes durante la noche o comportamientos extraños mientras duermes, es recomendable buscar atención médica para recibir un diagnóstico adecuado y explorar opciones de tratamiento disponibles.